¡¡¡Buenas!!!!
Julio llegó y
con él os saludamos por aquí cambiando de tema, dejamos los eventos, que nos
han tenido muy ocupadas y entretenidas y vamos a enseñaros nuestra última
creación por partida doble. La idea ha surgido de la infancia de mi madre, os
lo vamos enseñando y contando a la vez…
Siiii, ¡son dos
vestidos! Esta vez para niñas. Hemos buscado una tela fresca y favorecedora, de
“mucho poner” que se dice, perfecta para
todo el verano: para ir a la playa, a la piscina, para salir a dar un paseo
bajo el sol o al atardecer. ¡Se adaptan a cualquier plan!
Este estampado
de florecitas es muy combinable y “trotero”, queda ideal tanto con unas bambas
como con sandalias. Para los días más fresquitos, podemos conjuntarlo con una
chaquetita de punto. Para un toque más casual pongámoslo con una cazadora vaquera y en
tirantes para los más calurosos. Este vestido da infinidad de opciones. ¡Como
nos gusta!
La verdad es que
los peques están siempre pocholísimos con cualquier cosa que se les ponga, pero
creemos que también desde la infancia hay que buscar lo más cómodo y
favorecedor para ellos. Porque como en los mayores, el tono de piel, de pelo, de
los ojos… Hace que siente mejor un tipo de ropa y colores.
Así que desde la
infancia hagamos que nuestros “txikitxus” vayan tomando nota y conciencia de
que sentirse bien por fuera también les ayudará en un futuro a sentirse mejor
por dentro.
¡Feliz lunes!
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